“Un día como hoy 18 de mayo, en el año 1875 ocurrió uno de los sismos más destructivos en la historia del país. Quedaron destruidas casi en su totalidad las poblaciones de Cúcuta y Villa del Rosario en Colombia y poblaciones limítrofes de Venezuela”.

Así lo recordó el Servicio Geológico Colombiano (SGC), al entregar detalles del trágico hecho.

El evento, registrado a las 11:15:11 de la mañana, tuvo una intensidad de 6.8 de Magnitud de Momento (Mw), con epicentro en Cúcuta y localizado a una profundidad de 15 kilómetros.

“Este ha sido uno de los sismos más destructivos en la historia del país. Se presentaron sismos premonitorios. El domingo 16 de ese mes se sintió un fuerte temblor que agrietó los muros de algunas casas. El 17 de mayo hubo otro más leve”, señaló el SGC.

En la sola zona de Cúcuta se reportaron 461 víctimas (253 hombres y 208 mujeres), sin contabilizar los fallecidos en otras poblaciones vecinas, tanto de Colombia como de Venezuela.

Tras el hecho, precisó el SGC, “varios sobrevivientes de Cúcuta se trasladaron al sitio llamado ‘El llano de la Vega’ localizado a 2 kilómetros al sur de la población. Meses después el Gobierno encargó la elaboración del plano de la nueva población, la cual se edificó en el mismo sitio donde se encontraba la ciudad destruida y es el actual casco histórico de Cúcuta. También se presentó el reasentamiento de la población en Villa del Rosario (Colombia) y en Capacho y Ureña (Venezuela)”.

Para la época del sismo, indicó el SGC, “la tipología constructiva utilizada en la región era básicamente de paredes de tapia o bahareque con techos de paja o tejas, la cual se considera altamente vulnerable ante la ocurrencia de un sismo, lo cual pudo influir en que los daños fueran mayores”.

Los efectos en la naturaleza

El SGC reveló los daños causados.

- En Cúcuta: grietas en colinas cercanas y otra de cerca de 5 kilómetros de longitud entre Cerro Magro y el río Pamplonita.

- En San Cayetano: se abrió la tierra en profundas grietas.

- En Málaga: se reportaron grietas profundas.

- En Molagavita: se reportaron varias grietas en la población.

En Venezuela también se produjeron graves daños, así:

- En San Cristóbal: se reportaron grietas en el terreno, en cercanías a la iglesia.

- En Colón: se abrió una grieta en la plaza principal.

- En Ureña: en sus cercanías se reportaron grietas en el terreno de casi un metro de año.

Efectos en licuefacción

Según el Servicio Geológico Colombiano, en zonas aledañas a los ríos Pamplonita y Táchira se abrieron grietas que tenían más de un metro de largo y entre 2 a 3 metros de profundidad, “de las cuales brotó agua negra y fétida”.

Al sur de San Cristóbal, en Venezuela, en las calles también brotaron dos fuentes de agua de color rojizo.

Cambios hidrológicos

Como efectos del movimiento, las fuentes termales cercanas a Cúcuta, Villa del Rosario, San Antonio y ureña desaparecieron y emergieron unas nuevas.

Del mismo modo, se reportó que una fuente termal cercana a Santiago “expulsó barro negro y mucho humo”.

Daños en las construcciones

De acuerdo con el Servicio Geológico Colombiano, el movimiento causó graves daños en las construcciones de poblaciones de ambos países, así:

- Cúcuta. La mayoría de las construcciones como la iglesia, cárcel municipal, pulperías y en general las viviendas que conformaban la población quedaron destruidas o inhabitables.

- Villa del Rosario. La mayoría de viviendas quedaron destruidas, entre ellas la iglesia, la Casa de Gobierno ‘La Bagatela’, la casa natal del General Santander y el templo del Congreso, famoso por haber albergado el Congreso Constituyente de 1821.

- Cucutilla. La iglesia y varias casas colapsaron.

- Bochalema y Santiago. Colapsaron las iglesias.

- Chinacota y San Cayetano. Algunas viviendas quedaron destruidas.

- Málaga, Molagavita y Suratá. Varias construcciones quedaron averiadas.

- Arboledas, Ocaña, Pamplona, Pamplonita, Salazar y Toledo. Varias construcciones quedaron averiadas.

- Matanza. Muchas casas quedaron inhabitables, mientras que la iglesia y la capilla presentaron daños severos.

Daños en poblaciones venezolanas

En el territorio venezolano los daños reportados fueron los siguientes:

- San Antonio de Táchira. La mayoría de las viviendas quedaron destruidas.

- Ureña y Capacho. Hubo muchas edificaciones destruidas. Debido al estado de ruina en el que quedaron, las dos ciudades fueron trasladadas.

- San Cristóbal. Varias viviendas colapsaron, otras quedaron inhabitables y algunas presentaron daños leves.

- Colón, Constitución, Lobatera, Michelena, Palmira, Rubio y Táriba. Algunas viviendas quedaron destruidas.

Es de anotar que una vez registrado el terremoto, los sobrevivientes se quedaron sin comida ni refugios para pasar las noches y durante varios días se registraron saqueos.